La kombucha (también conocida como té kombucha u hongo de té) es una bebida probiótica fermentada preparada a partir de una base de té endulzado. Se cree que su origen se remonta a la antigua China, donde se conocía como «el elixir de la inmortalidad». Durante los siglos, la bebida se ha extendido por todo el mundo y se ha vuelto cada vez más popular. Hoy en día, se puede encontrarla en muchas tiendas y supermercados.

La kombucha se prepara añadiendo una colonia de bacterias y levaduras conocida como «SCOBY» (simbionte de colonia de bacterias y levaduras) a una mezcla de té (usualmente, té negro o té verde), azúcar y agua. La mezcla se deja fermentar durante un período de tiempo, generalmente de una a dos semanas, hasta que se forme una capa gelatinosa en la superficie. Esta capa gelatinosa se conoce como «colonia de bacterias y levaduras» o «SCOBY».

La kombucha tiene un sabor entre la sidra y el té dulce, con notas suaves a fruta y un toque de acidez. Contiene una variedad de probióticos, incluyendo bacterias y levaduras, que ofrecen muchos beneficios para la salud. Estos probióticos ayudan a mejorar la digestión, fortalecer el sistema inmunológico y reducir el estrés.

Es importante tener en cuenta que el contenido de alcohol en la kombucha puede variar dependiendo de los ingredientes utilizados y de la duración de la fermentación. Por lo tanto, se recomienda consultar con un profesional de la salud antes de consumir kombucha si se está preocupado por el contenido de alcohol.

Historia

La historia de la Kombucha tiene sus orígenes en la antigua China, aproximadamente en el año 221 A.C. durante el Imperio Qin. Se dice que el emperador la bebía para mantenerse joven y saludable. Se cree que el nombre proviene de un doctor llamado Kombu, quien llevó el té a Japón para salvar la vida del emperador japonés.

Durante los siguientes siglos, la Kombucha fue disfrutada ampliamente en China, Japón, Rusia y otros países. Los beneficios de esta bebida se han documentado en muchos textos antiguos escritos por los médicos y también se ha convertido en una herramienta terapéutica tradicional usada para tratar numerosos problemas de salud. No fue hasta el siglo XX que la Kombucha fue introducida en los Estados Unidos. En los años 90 se volvió muy popular como una alternativa saludable para las bebidas energéticas y refrescos excesivamente procesados.

Hoy en día, la Kombucha se produce y se distribuye a nivel comercial, aunque muchas personas también la hacen a casera. La Kombucha está disponible en muchas versiones diferentes, desde el tradicional té kombucha, hasta productos fermentados con frutas, hierbas y extractos.

te kombucha

Compuestos químicos y propiedades

Los compuestos químicos presentes en la kombucha son:

Acido glucónico: el ácido glucónico es un compuesto orgánico ácido que se forma durante la fermentación de la kombucha. Está formado por un ácido carboxílico llamado ácido glucurónico y un alcohol llamado ácido glucósido. Este compuesto es una fuente importante de energía para los microorganismos en la fermentación. Tiene una importante función a nivel organoléptico.

Ácido láctico: el ácido láctico es un ácido orgánico producido durante la fermentación de la kombucha. Es un ácido carboxílico que se produce cuando los microorganismos descomponen los azúcares en ácido láctico y dióxido de carbono.

Glicerina: la glicerina es un compuesto orgánico que se produce durante la fermentación de la kombucha. Es un alcohol con tres átomos de hidrógeno unidos a un átomo de oxígeno. La glicerina es una fuente de energía para los microorganismos durante la fermentación.

Ácido acético: el ácido acético es un ácido orgánico ácido producido durante la fermentación de la kombucha. Es el principal componente del vinagre y también se forma durante la fermentación de la kombucha. El ácido acético ayuda a mantener el equilibrio ácido-base en la kombucha.

Azúcares: los azúcares son una fuente de energía para los microorganismos durante la fermentación de la kombucha. Los azúcares se descomponen en alcoholes y ácidos durante la fermentación.

Polifenoles: compuestos químicos antioxidantes que se encuentran en el té y otros alimentos como vino, frutas y verduras. Estas moléculas han sido estudiadas ampliamente por sus propiedades beneficiosas para la salud humana

Ácido gálico: un ácido orgánico que se encuentra en muchas plantas, incluyendo el té. Es una sustancia antioxidante con un sabor un poco amargo y astringente. Algunos estudios clínicos han sugerido que el ácido gálico puede tener propiedades antiinflamatorias y también puede ayudar a prevenir la formación de cálculos renales en algunos casos.

Vitaminas B: varias vitaminas del complejo B, incluida la vitamina B1 (tiamina), la vitamina B6 (piridoxina) y la vitamina B12 (cobalamina). Son un grupo esencial de nutrientes solubles en agua que desempeñan un papel fundamental en la producción de energía, la síntesis de proteínas, la regulación del sistema nervioso, la función inmune y mucho más.

Microorganismos: varios microorganismos, como bacterias y levaduras, acompañan la cultura scoby y contribuyen a la fermentación.

Contraindicaciones

Las contraindicaciones del kombucha son las siguientes:

  1. Embarazo y lactancia: el kombucha contiene ácido acético, que es un ácido orgánico que puede estar contraindicado durante el embarazo y la lactancia.
  2. Ácido úrico alto: el kombucha contiene ácido úrico que puede aumentar los niveles de ácido úrico en la sangre. Esto puede ser especialmente perjudicial para las personas con niveles de ácido úrico altos o enfermedades relacionadas.
  3. Condiciones médicas: algunas condiciones médicas, como la enfermedad renal, el tracto digestivo, el hígado y la diabetes, pueden ser agravadas por el consumo de kombucha.
  4. Insuficiencia cardíaca: el consumo de kombucha puede causar aumento de la frecuencia cardíaca y presión arterial. Esto puede ser contraindicado para las personas con enfermedad cardiaca.
  5. Reacciones alérgicas: algunas personas pueden tener reacciones alérgicas a los ingredientes del kombucha, como el té negro, el jengibre y el azúcar.
  6. Intolerancia al alcohol: el kombucha contiene una cantidad insignificante de alcohol, por lo que puede ser contraindicado para las personas con intolerancia al alcohol.

taza de te fermentado kombucha

Beneficios de kombucha

Mejora la salud digestiva: kombucha contiene una gran cantidad de probióticos que ayudan a equilibrar el microbiota intestinal y alivian los síntomas del síndrome del intestino irritable, la colitis ulcerosa y la enfermedad inflamatoria intestinal.

Proporciona energía: el alto contenido de vitamina B del kombucha hace que sea una bebida energética natural. Esta vitamina B es esencial para la producción de energía en el cuerpo

Estimula la inmunidad: esta bebida contiene antioxidantes y compuestos antibacterianos que ayudan a fortalecer el sistema inmunológico. Las bacterias y levaduras presentes en el kombucha aumentan la producción de glóbulos blancos, lo que ayuda a incrementar el organismo en cofradías defensivas contra virus y bacterias.

Reducción del riesgo de enfermedad cardiovascular: los antioxidantes y los polifenoles presentes en la Kombucha ayudan a reducir el colesterol y la presión arterial.

Mejora la salud de la piel: los componentes de la kombucha ayudan a mejorar la producción de colágeno, lo que mejora la elasticidad y la apariencia de la piel.

Reduce el riesgo de ciertos cánceres: algunos estudios han demostrado que, debido a los antioxidantes presentes en la kombucha, existe un menor riesgo de desarrollar ciertos tipos de cáncer, como el de colon y el de mama.

Proporciona energía: el Kombucha contiene muchas vitaminas B, que ayudan a mejorar la energía y el rendimiento físico.

Puede ayudar a bajar de peso: la Kombucha contiene ácido acético, que acelera el metabolismo y ayuda a quemar grasa, lo que resulta en una reducción en el peso corporal.

Ayuda a reducir la inflamación: el ácido glucurónico presente en kombucha ha demostrado inhibir los procesos que causan inflamación. Además, también contiene glucósido de ácido cafeico que se ha relacionado con una reducción natural de la inflamación.

Detoxifica el cuerpo: el kombucha contiene ingredientes naturales que ayudan a eliminar las toxinas del cuerpo. Estas incluyen gluconato de zinc, ácido glucurónico y ácido glucurónico, theanina.

Kombucha para adelgazar

Aunque los efectos de la kombucha sobre la pérdida de peso no han sido investigados en profundidad, algunos estudios han encontrado una correlación entre el consumo de kombucha y una reducción en el índice de masa corporal.

Una serie estudios realizados permitieron demostrar que el té verde en general (el té usado frecuentemente para hacer kombucha) puede ayudar a bajar de peso a largo plazo. Algunos estudios informaron que las personas que bebían té verde perdieron más peso en comparación con aquellos que no lo hicieron.

Además, la acidez de la kombucha inhibe el apetito y puede ser una buena manera de reemplazar refrescos con alto contenido calórico.

Sin embargo, es importante tener en cuenta que la kombucha contiene cafeína, y puede no ser apropiada para todos. El fabricante también puede añadir ingredientes adicionales como el azúcar, y esto puede aumentar las calorías de su bebida. Por lo tanto, es importante que las personas almacenen la kombucha con moderación si desean conseguir algún beneficio para la salud.

Si desea usar kombucha para adelgazar, es importante seguir los consejos a continuación:

  1. Elija kombuchas que contengan menos de 0.5% de alcohol por volumen (ABV). Esto puede variar de marca a marca, así que asegúrese de leer etiquetas y elegir el producto adecuado.
  2. Elija kombuchas con un contenido calórico bajo y sin aditivos. Los fabricantes a menudo agregan azúcar y otros ingredientes al kombucha para mejorar el sabor, pero esto hará que su bebida sea más calórica.
  3. Use kombucha como un reemplazo de refresco. Si anhela una bebida dulce, el kombucha puede ser una excelente alternativa a los refrescos con alto contenido calórico.
  4. Coma una dieta saludable, equilibrada y baja en calorías. La dieta y el ejercicio todavía son la mejor manera de perder peso. Si el kombucha se usa en conjunto con estos hábitos, puede contribuir a la pérdida de peso.

¿Qué tipo de té usar para preparar kombucha?

preparacion de kombucha

Si has estado investigando cómo hacer kombucha, entonces habrás escuchado que deberías usar un té de calidad para asegurarte de obtener los mejores resultados. Pero ¿cuál es el mejor tipo de té para usar cuando estás preparando kombucha?

El té más comúnmente usado para preparar kombucha es el té negro, té verde y el té blanco. Estos tipos de tés contienen diferentes cantidades de taninos y polifenoles, que son nutrientes esenciales para el kombucha. Al provenir de la planta del té camellia sinensis, estos tés contienen teanina y cafeína que en combinación con azúcar sirven de nutrientes para «SCOBY»

El té negro es el más oxidado de todos los tés. Tiene una mayor cantidad de taninos y es el mejor tipo de té para preparar el kombucha. Tambien contiene altos niveles de cafeína y minerales, lo que ayuda a promover la fermentación. Es recomendable comenzar con el té negro e ir introduciendo otros tés o infusiones al preparar los siguientes lotes de kombucha. El té “English Breakfast” o té de Ceilán son tés negros populares para la preparación de kombucha. Se aconseja evitar tés aromatizados, tales como té chai o té Earl Grey.

El té verde es conocido por tener un ligero aroma y un sabor refrescante. Contiene taninos y polifenoles en cantidades moderadas. El té verde también contiene aminoácidos, lo que ayudará a equilibrar la fermentación de la kombucha. Además, el té verde ofrece un amargor ligero que le da un sabor refrescante a la bebida. Sin embargo, a diferencia del té negro, el té verde contiene menos cafeína y minerales, lo que implica una fermentación más lenta. Es recomendable utilizarlo en combinación con el té negro, lo que ayudará a conseguir una mezcla única de sabores y beneficios nutritivos.

El té blanco es una buena opción para hacer kombucha ya que es rico en nutrientes y proporciona valiosos antioxidantes. Tiende a ser más suave en sabor que el té negro y, por lo tanto, la kombucha hecha con él tendrá menos sabor amargo. Además, la kombucha hecha con té blanco contiene una mayor cantidad de probióticos que la del té negro. Se recomienda utilizarlo en combinación con otros tés.

Algunas infusiones, como la de hibisco y el rooibos también son a menudo utilizados para la preparación de kombucha. Se recomienda añadirlos a los tés para dar un toque de sabor y aumentar los beneficios saludables de kombucha.

Como preparar kombucha

Debido a su contenido ácido, la kombucha debe prepararse en cuencos de barro, vidrio, porcelana, acero inoxidable o madera. Es importante evitar el uso de contenedores de plástico o de aluminio debido a su potencial para reaccionar con ácidos del líquido.

Ingredientes:

  • 1 taza de azúcar
  • 8 tazas de agua
  • 1/2 taza de té negro
  • 1/4 taza de té de té verde
  • 2 cucharadas de Kombucha SCOBY

Instrucciones:

  1. En una olla grande, mezcle el azúcar con 8 tazas de agua. Caliente la mezcla a fuego medio-alto hasta que el azúcar se haya disuelto por completo. Retire la olla del fuego.
  2. Agregue el té de té negro o el té de té verde a la mezcla de agua y deje reposar durante 10 minutos.
  3. Coloque un colador sobre un tazón grande y vierta la mezcla de té a través del colador. Deje reposar a temperatura ambiente durante al menos 1 hora.
  4. Agregue la SCOBY y revuelva suavemente para mezclar.
  5. Transfiera la mezcla a un frasco de vidrio limpio con una tapa que se cierre herméticamente.
  6. Deje fermentar a temperatura ambiente durante 7-10 días.
  7. Cuando la kombucha esté lista, filtre la mezcla para separar la SCOBY y el líquido.
  8. Guarde la SCOBY en un tazón con un poco del líquido de kombucha para la próxima vez.
  9. Sirva el líquido de kombucha frío o caliente.